Siempre disfruto conociendo nuevos lugares, y este es uno de ellos, el Arco de Arno, en la sierra de Opakua.
Un lugar mágico, irrepetible.
Pensar que esto lo ha echo la naturaleza poco a poco es increíble, y que aun seguira por muchos años. Solo espero poder seguir disfrutando de este lugar.
Aitor Abadia, Fotoneoo